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La verdad de los calendarios de Gloria Trevi

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La verdad de los calendarios de Gloria Trevi

Maritza López fue la fotógrafa de los calendarios de Gloria Trevi y reveló detalles que vivió durante las sesiones supervisadas por Sergio Andrade

¿Quieres conocer  a verdad detrás de los famosos calendarios de Gloria Trevi? Maritza López fue la fotógrafa de los famosos calendarios de Gloria Trevi y nos reveló en exclusiva detalles que vivió durante las sesiones supervisadas por Sergio Andrade.

Gloria Trevi fue retratada para hacer diferentes calendarios en los inicios de su carrera por Maritza López, quien es considerada una de las mejores fotógrafas de desnudo en Latinoamérica y en exclusiva para Univision Entretenimiento recordó anécdotas del desarrollo de los cuatro calendarios que tuvo a su cargo bajo la supervisión de Sergio Andrade antes de que explotara el escándalo que los envió a la cárcel.

¿Quién es ella?

Maritza comenzó su carrera en los años 70 dentro del periodismo en las revistas Proceso, Siete y más tarde Eros, donde se expusieron sus trabajos de desnudo para más tarde dedicarse a la publicidad y a las portadas de disco , trabajo que la llevó a la fama. Así conoció a Sergio Andrade, quien también ya era considerado uno de los mejores productores de discos de la época en México, apodado ‘Rey Midas’ por el elenco que manejaba: Lucero, Cristal y Yuri, entre otros.

En esa época Gloria Trevi estaba en el grupo musical Boquitas Pintadas, pero Sergio ya la preparaba como solista. Maritza hizo las dos primeras portadas de disco de Gloria quien ya se apuntalaba a ser una gran estrella: “Gloria ya traía las medias rotas y el pelo alborotado, tenía una imagen reconocida y Sergio quería hacer lo impensable, un calendario sensual por el puro gusto de ver a la cantante ligera de ropa”.

Éxito total

El calendario fue un éxito en 1992, el primer tiraje constó de 120,000 ejemplares y luego hubo otras dos ediciones más. Según Maritza no quedó un solo número en los puestos de periódicos: “Me la mandó al estudio, yo ni siquiera sabía que era (para) un calendario. El éxito nos sorprendía honestamente. Gloria había dicho que quería ser presidente y que deseaba ser astronauta, ese fue también concepto para sus fotos. El segundo calendario, fue un escándalo y las ventas eran una cosa ridícula, se vendía como pan caliente. Yo hice las ediciones 1992, 1993, 1994 y 1995”.

El calendario resultó lo impensable, casi un movimiento social donde Carlos Monsivaís y Elena Poniatowska, intelectuales mexicanos, explicaban en los medios de comunicación el fenómeno de lo que lograban los calendarios de la cantante, los cuales extrañamente nunca fueron censurados.

Maritza revela que el último calendario no quiso realizarlo debido a la baja calidad que Sergio quería. Según su testimonio, todo se debía a los consejos de la gente de confianza del actor Arnold Schwarzenegger, quienes sugerían bajar la calidad para luego subirla: “Fue un calendario desastroso, lo hizo Sergio, primero puso a Gloria en una alberca con los aros olímpicos y nunca pidió permiso, por lo que tuvieron que recoger todos los calendarios, además se encargó de denigrar a Gloria, cosas que, al menos en los calendarios que yo hice no permití, como aplastarle los senos, embarrarla de melcochas, ese día frente a Gloria le dije no a Sergio (a sus peticiones), y ella hizo un gesto de agradecimiento que yo en ese momento no comprendí”.

Al cuestionar a Maritza al respecto al clan que pasó a ser conocido como Trevi-Andrade y si había notado cosas raras alrededor de la cantante, tomó aire y dijo tajante: “En el 1997 ya vigilaban mucho a Gloria, pero quiero aclarar que mi relación con ellos sólo era de trabajo, yo tomaba fotos y él me daba mi cheque. En ocasiones me mandaba chamaquitas para tomarles fotos y pues se las tomaba, yo ya notaba que había niñas que no se separaban de Sergio. Un día tomábamos fotos en Cuernavaca y las niñas (estaban vestidas) de pants, muriéndose de calor, (pero) él decía que no tenían calor porque así funcionaban. Ese día las chicas ni siquiera cenaron y fue el mismo Sergio que para cenar les eligió un menú sencillo, ese fue el último calendario que yo hice, el que siguió lo hizo él, fue sin duda una mamarrachada”.

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